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Estrés y dolor crónico. Una relación nada amistosa.

Con el estilo de vida actual no es raro sentirse estresado en múltiples ocasiones. El problema surge cuando los niveles de estrés son demasiado altos y el estado se vuelve cotidiano. Entonces, nuestro organismo no responderá de manera normal y provocará consecuencias negativas para nuestra salud que, en algunos casos, hasta podrían derivar en dolor crónico. Por eso, desde Medicina del Dolor le queremos contar cómo influye el estrés en el dolor crónico y le damos varios consejos para que lo mantenga a raya.

¿Por qué el estrés es el gran enemigo del dolor crónico?

El estrés se define como el conjunto de reacciones fisiológicas que hacen que nuestro organismo se prepare para la acción. Esto hace que seamos capaces de adaptarnos de forma natural y responder ante diferentes situaciones de la vida. Ahora bien, cuando ese estado se vuelve crónico, se sufren alteraciones en los mecanismos adaptativos de nuestro organismo llegando incluso a padecer el síndrome de adaptación general y los problemas de salud comienzan a surgir.

Como demuestran investigaciones médicascuando los niveles de estrés son excesivos, nuestro cuerpo se prepara para la supervivencia: las hormonas se alteran, el ritmo cardiaco se acelera, la atención y la memoria comienzan a fallar. Entre estas respuestas neuronales y endocrinas también se puede desencadenar el dolor como síntoma de que algo no va bien en nuestro organismo.

Aunque los problemas no solo llegan hasta ahí. Los trastornos del dolor también pueden ser los causantes del estrés; con lo cual, se convierte en un enemigo a combatir en cualquier situación.

Consejos para combatir el estrés

Tanto si padece dolor crónico como si no, cuidar cuerpo y mente para que estén sanos le ayudará a gestionar fácilmente el estrés. Desde Medicina del Dolor le recomendamos:

1. Aceptar la realidad

Ser consciente de sus circunstancias y aceptarlas es fundamental para mantenerse alejado el estrés. Esto no significa que nos mostremos resignados a nuestra vida; sino que, ante cuestiones contra las que no se pueden luchar como una enfermedad, no debemos obsesionarnos. Se trata de practicar el mindfulnessuna terapia que ayuda a sentirnos bien y mejorar nuestra calidad de vida.

2. No sobrecargarse

Otra forma de prevenir el estrés consiste en asumir las tareas que realmente puede hacer. Por ejemplo, sobrecargarse con excesivo trabajo o con muchas responsabilidades familiares puede provocar un alto estado de estrés que, a largo plazo, se vuelve complicado de gestionar. En ocasiones, decir ‘no’ también beneficiará su salud. 

3. Practicar ejercicio

El deporte también ayuda a combatir el estrés. Al realizar una actividad física, nuestro organismo libera endorfinas que actúan como calmante natural del sistema nervioso. Así se consigue una sensación de paz y bienestar en la que el estrés no tendrá nada que hacer. Además, tampoco hace falta que el ejercicio sea excesivo: puede caminar media hora al día o apuntarse a nuestras clases de gimnasia de la salud o Mat Pilates en Valencia. 

4. Llevar una alimentación saludable

Algunos alimentos también son fuente de salud mental. Por ejemplo, el té verde nos aporta potentes antioxidantes que nos ayudan a tener un estado de ánimo positivo. Al igual que los arándanos que, además, cuentan con minerales como el magnesio y el manganeso útiles para reducir el estrés. Incluso hay expertos que recomiendan una onza y media de chocolate negro al día para disminuir el nivel de hormonas perjudiciales.

Gracias a estos consejos comenzará a sentir los beneficios de una vida sana rápidamente. Si quiere más consejos sobre cómo combatir el estrés y el dolor crónico con técnicas profesionales, le atenderemos en el 963 177 827 o directamente en nuestras clínicas de Medicina del Dolor en Valencia.

Dra. Carmen De Andrés
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